El día lunes 21 de marzo, y en el marco inaugural de una serie de actividades que son parte del proceso de despedida de nuestros estudiantes, se realizó en dependencias del Liceo Salesiano Manuel Arriarán Barros, la entrega de la piocha institucional del LAB, elemento que sólo puede ser portado por educadores y alumnos que inician el último año de su etapa escolar.

La ceremonia comenzó puntual y se llevó a cabo en el gimnasio del colegio, en el horario habitual de los buenos días. Entre los asistentes se encontraban: los estudiantes desde 7° a IV° medio, además de los miembros del consejo escolar, y representantes del CEELAB.

Luego de una breve introducción por parte de los locutores, se procedió a presentar símbolos que representan el proceso educativo de nuestros jóvenes: una biblia, un libro de ciencias, la imagen de Don Bosco, y la polera institucional.

El primero en pasar adelante, el director de la presencia salesiana de la zona sur de Santiago, el P. Pedro Carrera Reyes Sdb, quien leyó la carta escrita por San Juan Bosco a los jóvenes del Oratorio de Valdocco en 1844.

“Jóvenes del LAB, porten con orgullo esta insignia, entiendan lo que ello representa, porque tenemos el honor de ser salesianos del Liceo Manuel Arriarán Barros”, agregó el Padre tras realizar la bendición a todos los presentes.

Posteriormente, fue el turno de nuestra rectora, la señora Marcela Yáñez de saludar especialmente a los jóvenes de IV° medio: “Estamos reunidos en esta instancia para iniciar el proceso de despedida con este gesto; a través de él reconocemos la importancia de los IV° medios, ya que son nuestro mayor orgullo. Deseamos que siempre sean felices, que porten esta piocha con orgullo y que María Auxiliadora los proteja siempre con su manto de madre”, indicó.

Para finalizar la ceremonia, los profesores jefes entregaron las insignias a todos los alumnos de IV° Medio, para después, posar para la tradicional fotografía en conjunto a la rectora y el Padre director.

Con este signo, queremos expresar que este nivel, el último de nuestro Liceo, constituye la encarnación y síntesis de nuestro proyecto educativo-pastoral. Los compañeros de niveles inferiores, podrán encontrar en los jóvenes que porten la piocha, personas que se sienten orgullosos de pertenecer a esta comunidad, y al mismo tiempo, ejemplo de lo que significa ser un “Buen cristiano y Honesto ciudadano”.